Hay un Spritz para cada persona: probamos tres versiones del cóctel de moda que gusta a todos
Acudimos a tres templos del buen beber madrileños para desentrañar el éxito de esta bebida y probar diferentes (¡y sorprendentes!) variaciones
Spritz es una palabra onomatopéyica. Pronunciar este vocablo de origen alemán evoca una sensación chispeante, fresca y alegre. De un tiempo a esta parte, la hemos incorporado a nuestro vocabulario porque da nombre al cóctel más deseado, el que está más de moda y el que todo el mundo quiere beber. Hemos pedido a tres de las coctelerías estrella de Madrid que nos preparen los Spritz con los que han renovado sus cartas y están seduciendo paladares de todos los gustos: en Mauz Madrid probamos el St-Germain Spritz, en el hotel Urban, el Spritz con vodka Grey Goose y en Ella Sky Bar, una versión libre de alcohol con Martini Vibrante. Para probarlos tú también, solo tienes que acercarte.
A cada Spritz, su maridaje
St-Germain Spritz: Nico Costantino cree que el Spritz es un cóctel perfecto para limpiar sensaciones de grasa en boca, por lo que va perfecto “con un buen plato de jamón ibérico o una tabla de quesos variados”.
Ganso Spritz: La versión del Spritz del Hotel Urban es, para Óscar Durán, elegante pero también refrescante, lo que la hace ideal para acompañar “desde un ceviche de pescado blanco, como la lubina, a un bocadillo de calamares en pan bao”.
Free Spritz: Al no tener alcohol, la versión de Miguel Peñalver y del Ella Sky Bar, es capaz de armonizar con “platos grasos como unos torreznos con guacamole, pero también con el carácter picante y marino de unas zamburiñas flambeadas con mayonesa de kimchi y lima”.
¿Cuál es tu reacción?