La desestacionalización del turismo en España avanza pese al verano de récord
Un estudio de CaixaBank Research destaca que las pernoctaciones y llegadas de los turistas aumentan más en los seis primeros meses del año que en julio y agosto,
Hasta antes de la pandemia, cada septiembre se convertía en sinónimo de incertidumbre para el sector turístico nacional. La llegada del final del verano traía consigo la conclusión de miles de contratos temporales, hoteles semivacíos y una notable caída en la facturación. Sin embargo, en los últimos tiempos el panorama ha cambiado drásticamente. Los datos indican que el turismo en España está experimentando un proceso de desestacionalización, lo que significa que la llegada de visitantes se ha vuelto más constante a lo largo de todo el año, en lugar de concentrarse solo en los meses de verano. Aunque los meses de julio y agosto siguen siendo los más brillantes, el último estudio sectorial de CaixaBank Research, cuyos datos adelanta este periódico, muestran que en este año las pernoctaciones durante el verano aumentaron menos ―un 1,9% en julio y un 2,5% en agosto en términos interanuales― que en el primer semestre en conjunto, cuando se registró un repunte total del 6,8%. Según el centro de análisis, “esta desaceleración relativa refleja la mencionada desestacionalización del turismo, que está redistribuyendo la afluencia turística a lo largo de todo el año”.
Mejor punto de partida para cierre de año
A pesar de que la Seguridad Social perdió casi 195.000 cotizantes entre julio y septiembre debido a la suave desaceleración que está registrando el mercado laboral, las previsiones de CaixaBank Research apuntan a que la cifra media de nuevos afiliados alcanzará prácticamente los 500.000 en 2024 y superará los 400.000 en 2025. La buena marcha del mercado laboral, sumada a la recuperación del poder adquisitivo y la caída de los tipos de interés, permitirá que el consumo privado crezca por encima del 2% anual. Es posible que este crecimiento mejore en el medio plazo, dada la elevada tasa de ahorro de los hogares y el ritmo de creación de nuevos hogares.
Las previsiones indican que el consumo y la inversión ganarán protagonismo en el corto y medio plazo, en detrimento de la demanda externa. Esto se debe a las mejores condiciones financieras y a las significativas bajadas de los tipos de interés. Los analistas contemplan cuatro reducciones de 25 puntos básicos en los tipos en 2025, una más que en el escenario anterior, hasta alcanzar un nivel del 2,25% a finales del próximo año.
¿Cuál es tu reacción?