Laura Ponte: “En un test que me hizo una vez mi hijo pensé que saldría de centro, pero salí anarcocomunista”
A sus 51 años, sigue siendo la eterna modelo española. Las marcas y la industria de la moda la quieren como el primer día mientras ella presume de ser una de las pocas que ha decidido envejecer sin operaciones ni pinchazos. “No quiero dejar de ser yo”, argumenta.
Decir Laura Ponte (51 años, Vigo) es nombrar a una de las grandes de la moda española. Empezó su carrera de modelo con 19 años, tras ganar el Look of the Year de la agencia Elite y, desde entonces, no ha parado. Treinta años después, un matrimonio con Luis Beltrán Alfonso Gómez-Acebo y Borbón (primo de Felipe VI) y su posterior divorcio, dos hijos e infinitas portadas que la llevaron a ser en 1996 la tercera modelo mejor pagada del mundo, Ponte ya no se sube a las pasarelas pero sí protagoniza campañas como la última de Zara o de Phoebe Philo, que se hicieron virales precisamente porque mostraba con naturalidad que el tiempo también había pasado por ella. Como por el resto de los mortales, algo no tan común en su mundo. Hace dos años, la operaron por una perforación de la córnea y, aunque ya ha vuelto al trabajo, sigue recuperándose y con puntos en el ojo.
Estilismo:
Juan Cebrián.
Maquillaje y peluquería:
Jordi Fontanals (Ana Prado) para Nars, Aveda y GHD.
Manicura:
Lucero Hurtado.
Producción:
Cristina Serrano.
Asistente de fotografía:
Álvaro Tomé.
Asistente de estilismo:
Paula Alcalde.
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