El Gobierno rehúye la disputa con Mazón para no agravar la desafección social
El PP encapsula al presidente valenciano y volverá a cargar contra Sánchez por los casos de Begoña Gómez y José Luis Ábalos
Todos los asuntos relevantes, la toma de decisiones en los partidos y en los gobiernos, quedaron sepultados en la tarde-noche del 29 de octubre, cuando una gota fría sin precedentes en este siglo devastó desde el punto de vista humano y material la provincia de Valencia. La cronología de los hechos marca las presuntas responsabilidades, situadas en las cruciales primeras horas en la Generalitat valenciana y con su presidente, Carlos Mazón, a la cabeza. Trece días después de la catástrofe, el Gobierno de la nación es consciente de que el dolor, la indignación, la desesperanza y la desconfianza de millones de españoles, no solo los afectados en Valencia, se dirigen hacia el Ejecutivo central y el autonómico, hacia los políticos en general. La peligrosa pregunta —“¿dónde está el Estado, que en su lugar tienen que venir voluntarios para salvar a sus compatriotas?”— es una realidad de la que el Ejecutivo es consciente y que trata de borrar.
¿Cuál es tu reacción?