Nada ni nadie puede con el maestro Jannik Sinner
El número uno supera otra vez a Fritz (doble 6-4 en 1h 24m) y redondea una semana perfecta, como el primero que no cede ningún set desde Lendl en 1986
Clostebol aparte, quizá no haya descripción más atinada que la escrita por Paolo Bertolucci en La Gazzetta dello Sport, donde el extenista, seis títulos para su país en los setenta, de 73 años, titulaba antes de esta última final maestra en Turín: “Sinner e il potere di avere tuto sotto controllo”. Es decir, Jannik y el poder de tenerlo todo bajo control. Y vaya si lo tiene el campeón, que ha hecho de la victoria una costumbre y que conforme va entrando en trance este domingo, afilando los ojos bajo la visera y echando más y más carbón a su cordaje, dinamita en realidad, va adueñándose de un trofeo de prestigio que corona una temporada sencillamente majestuosa, con ocho títulos (dos de ellos grandes), 70 triunfos y, lástima, lamentan los que le siguen y le apoyan, sus devotos, ese manchurrón del positivo detectado en Indian Wells. Pero hoy por hoy celebra: doble 6-4 (en 1h 24m) ante Taylor Fritz, rendido este otra vez a la evidencia. Ahora mismo, Sinner es un ciclón.
“ME GUSTA HABLAR DENTRO DE LA PISTA”
Nada más resolverse la final, el presidente de la ATP, el italiano Andrea Gaudenzi y su homólogo de la Federación Italiana de Tenis y Pádel (FITP), Angelo Binaghi, aprovecharon el escenario para anunciar que Italia albergará la Copa de Maestros hasta 2030. En un principio, un año más en Turín y luego, en otra sede que, probablemente, sea Milán.
“El público ha sido fundamental para mí”, quiso enfatizar Sinner, arropado todos los días por una grada que ha disfrutado de su “tenis de alta calidad”, en palabras del protagonista, y de su éxito.
“No empecé la temporada con el objetivo concreto de ganar un grande o ser número uno. Y el año que viene será igual, todo lo que podamos ganar, lo ganaremos, y del resto aprenderemos. Creo que esta mentalidad nos ha ayudado todo este año. Estoy muy feliz, es una forma muy agradable de cerrar la temporada. Me gusta hablar dentro de la pista de tenis”, señaló.
Consciente de que en 2025 deberá defender una cuantiosa bolsa de puntos, el campeón, sucesor de Djokovic, se limitó a decir: “No sé qué sucederá, pero lo que es seguro es que voy a prepararme de la mejor forma posible”. Mientras, Fritz le piropeó: “Ahora mismo él es el mejor del mundo, así que es genial jugar contra alguien mejor que tú, porque es cuando ves qué necesitas mejorar. Me ha impresionado su saque”.
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