Por qué es tan difícil comer con niños en restaurantes con estrella Michelin
Algunos establecimientos de alta cocina prohíben el acceso con menores de determinada edad y desde las asociaciones de consumo advierten de que esa práctica no es legal
“El restaurante no permite la entrada a bebés ni niños menores de siete años”, “Por norma general, no se aceptan reservas con menores de 14 años”, “No se permite la entrada a niños/as menores de 10 años”. En ocasiones, ir a comer con niños no es que sea una tarea difícil, es que en algunos establecimientos de alta cocina es directamente imposible, ya que prohíben expresamente en sus páginas web acudir con menores de determinada edad. Así ocurre, por ejemplo, en sitios como Azurmendi, de Eneko Atxa o en el restaurante Martín Berasategui, ambos con tres estrellas Michelin. “No es que tengamos nada en contra de los niños. Ojalá pudieran venir todos a comer, pero nos hemos visto obligados por malas experiencias previas que generaron quejas de otros clientes”, explica Ane Berasategui, hija del cocinero vasco y responsable de la comunicación del grupo familiar, sobre la política que adoptaron hace alrededor de ocho años de no admitir reservas con menores de siete años en el establecimiento de Lasarte (Gipuzkoa). En el caso del restaurante de Atxa, ubicado en Larrabetzu (Bizkaia), han declinado responder a EL PAÍS Gastro por motivos de agenda.
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